A través del llamado 'Racesafe, el conjunto australiano garantizará la salud y la seguridad de los corredores y el personal en las carreras.
GreenEdge Cycling
El Mitchelton Scott ha anunciado su propia política de seguridad sanitaria anti-covid-19, el "Racesafe", para afrontar la temporada de carreras que comenzarán el próximo día 28 con la Vuelta a Burgos. Con el "Racesafe", el equipo australiano trata de garantizar la salud y la seguridad de los corredores y el personal como máxima prioridad para competir en las pruebas del calendario.
Para complementar los procedimientos de la UCI y de cada prueba contra lal covid-19, el Mitchelton-Scott también ha desarrollado un documento interno con su equipo médico y será revisado constantemente durante la temporada. Para garantizar la salud, las medidas adicionales que debe tomar el equipo incluyen la presencia de un médico de equipo en cada carrera, tanto para los equipos masculinos como femeninos.
Se va a desarrollar un programa de evaluación y pruebas covid-19 para todos los miembros del equipo para minimizar el riesgo de virus dentro de una "burbuja de equipo". Las normas cuentan con la responsabilidad colectiva en torno a cubrirse la cara, cumplir el distanciamiento social y la higiene. El equipo ha suspendido la firma de autógrafos, selfies o actividades fotográficas estándar con los seguidores.
"Hemos seleccionado las carreras fuera del calendario World Tour por una serie de razones. Una es prepararnos para carreras y objetivos más grandes, que obviamente son Tour, Giro y Vuelta y ciertas carreras de un día", señaló Matt White, director deportivo. Según White, "no hay excusas para volver a competir. A pesar de que, como equipo, tuvimos probablemente el 90% de los corredores fuera de la carretera durante dos meses, todos tenían un entrenador local y una ventana lo suficientemente larga en la carretera como para competir cuando volvamos".
El doctor David Hulse, responsable del "Racesafe" señaló que no se deben olvidar las medidas de seguridad porque aún hay riesgo. "Tanto los corredores como el personal acogen con gratitud la oportunidad de completar la temporada, ya que todos hemos soportado un período desafiante e inquietante, pero a pesar del éxito de muchos países europeos en salir de las restricciones de bloqueo, aún queda algo de riesgo. La UCI, los organizadores de la carrera y todos los médicos del equipo también han estado muy activos en el desarrollo de nuevos procedimientos en torno a las pruebas y la infraestructura para reducir los riesgos presentados por el covid-19 dentro de la burbuja de la carrera. Nuestro papel como médicos del equipo es supervisar la mitigación de riesgos y permitir que los corredores y los directores deportivos se concentren en las carreras".
Fuente:www..as.com
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